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Leclerc, tras ganar en Mónaco: "Era el sueño de mi padre y el mío"

Foto del escritor: Eliana LedesmaEliana Ledesma

Charles Leclerc lo ha conseguido. El piloto monegasco consiguió ganar en casa por primera vez en un Gran Premio de Mónaco en el que salía de la pole position. Nunca ningún habitante del Principado había logrado esta hazaña y su victoria entra de lleno en los libros de historia.

 

Gran parte del trabajo lo hizo en la clasificación, pero dos veces antes se había encontrado en la misma situación sin tener la oportunidad de llevarse la victoria a casa por diferentes razones, todas ajenas a él.

 

Esta vez, en cambio, todo salió bien. Mérito suyo, pero también de un Ferrari tácticamente perfecto: "No puedo explicar cómo me siento. Es una carrera tan difícil. Creo que el hecho de haber estado ya dos veces en la pole y luego no haber podido ganar hace que esta victoria sea aún más bonita", dijo.

 

Además, el monegasco admitió que esta victoria es especial porque ha significado cumplir su sueño y el de su padre, que falleció hace siete años después de hacer todo lo posible por acercar a su hijo al automovilismo y verle destacar entre los más grandes.

 

"Significa mucho para mí, porque es la carrera que me hizo soñar con ser piloto de Fórmula 1 cuando era niño. Así que sí, fue una carrera difícil emocionalmente porque a 15 vueltas del final sólo esperas que no pase nada, porque ya me estaba emocionando y estaba pensando en mi padre más que en conducir".

 

"Él me dio tanto y dio tanto para asegurarse de que yo estuviera aquí hoy, y era un sueño para nosotros que yo corriera aquí y luego que pudiera ganar esta carrera. Es increíble", dijo con los ojos llorosos.

 

En cuanto a la carrera, Leclerc, más que presionar, tuvo que pensar en gestionar el ritmo de la carrera para evitar que los McLaren tuvieran una ventana suficiente como para entrar en boxes y colocarse detrás de los dos coches de Maranello con neumáticos mucho más nuevos.


"Es realmente difícil el fin de semana aquí. Teníamos mucho margen al principio, pero también sabíamos que teníamos que dar casi 78 vueltas con el mismo juego de neumáticos. Fue muy difícil, pero hicimos una gran gestión con las gomas. Hubo una gran parte de la carrera en la que tuve que gestionar el margen sobre Russell para evitar que los McLaren tuvieran una parada gratis en boxes".

 

"Pero luego todo ha ido bien, he podido apretar más al final y el coche ha ido fantástico. Tengo que dar las gracias al equipo por hacer un trabajo excepcional en los últimos meses y darme la oportunidad de ganar esta carrera. Es muy especial".

 

"Quiero dar las gracias a toda la gente de Mónaco. Incluso en el desfile de pilotos fue especial porque vi a mucha gente que conozco en las gradas. Significa mucho para mí este fin de semana, esta carrera, y agradezco a todos el inmenso apoyo. Muchas gracias a todos", concluyó el segundo clasificado en el campeonato de constructores.

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